Al parecer la historia de Novak Djokovic aún tiene mucho para contar. Y es que si bien al serbio se le revocó ladecisión gubernamental y dio la razón al tenista serbio, aún se encuentra a la espera la decisión que tome el ministro Alex Hawke de inmigración.
Pero no será una decisión fácil, ya que los australianos están presionando para que se le revoque el permiso. De hecho, desde NewsCorp realizaron una encuesta para los medios australianos Herald Sun y The Daily Telegraph. Y ahí los datos fueron contundentes: un 83% de los encuestados quiere que Nole sea deportado del país oceánico.
Recordemos que Djokovic está siendo investigado por las autoridades australianas por las irregularidades que presentó en su declaración para poder ingresar al país y por la PCR positiva que presentó el 16 de diciembre, la cual ha dado mucho que hablar porque se admitían hasta el 10 de ese mes. Además, el serbio asistió el 17 y 18 de diciembre a actos públicos en los que no llevaba mascarilla ni guardaba distancia cuando en realidad debería estar guardando cuarentena en casa.
Por ahora, Nole está esperando por su debut en el Australian Open de este domingo, a horario por definir, ante su compatriota Miomir Kecmanović por la primera ronda del torneo.